Prensa Femenino FVF.-
El triunfo de Estudiantes de Caracas ante Flor de Patria, el pasado domingo 11 de agosto, le puso fin a la temporada 2019 de la Superliga Femenina de Venezuela (tercer año de historia). El torneo contó casi cinco meses de competición, 14 equipos, 98 partidos, más de 330 jugadoras y un sinfín de emociones. La competitividad aumentó dentro de la cancha y se vio una mejoría en la asistencia de público.
Este campeonato tuvo la particularidad que no tuvo Apertura ni Clausura, sino que fue certamen único. También aumentó el número de clasificados para las fases de eliminatorias: de dos a cuatro. Mientras que para la segunda vuelta de la fase de grupos se instauró la norma de la juvenil en cancha.
“Se vio en este torneo un mayor ritmo de juego y más paridad en los partidos. Antes se veían resultados más abultados y ahora son más cerrados”, explicó Luis Vásquez, directivo de FVF y presidente de la Comisión de Fútbol Femenino. Vásquez añadió: “En el grupo Centro Occidental se definió un cupo en la última fecha, antes eso pasaba con mucha antelación”.
La gerente de Fútbol Femenino Andreína Peláez coincidió: “Podemos destacar que se aumentó la competitividad del torneo. Las jugadoras y responsables de clubes colaboraron para el desarrollo”. La directiva agregó: “A pesar del cambio del formato, los equipos mostraron bastante motivación y responsabilidad para cumplir a cabalidad con el torneo. Eso nos permite como gerencia de fútbol femenino hacer el torneo más profesional”.
La norma de juvenil en cancha fue un punto de inflexión y las representantes de la lozanía en los onces iniciales dieron la talla, incluso, llegaron a ser piezas fundamentales de sus equipos. “En conjunto con el cuerpo técnico de la selección nacional, se tomó la decisión de poner la regla de jugadora norma (años 2003-2004), entendiendo que una jugadora menor de 16 años no puede tener contrato profesional”, expuso Vásquez.
El directivo prosiguió: “El promedio de edad de la Superliga es de 21 años. Apostamos al porvenir, al renacer deportivo, ya que nuestro objetivo es ir a los próximos mundiales sub-17 y sub-20 (…) el fútbol femenino no es un gasto, sino una apuesta a futuro”. Peláez indicó: “Al incluir una jugadora de la norma se le da un carácter más profesional a las jornadas y se permite un mejor desarrollo de las jugadoras”.
¿En el futuro inmediato? “Realizaremos la Copa Venezuela para darle continuidad a la jugadoras de selección, que van a tener competencias sub-17 y sub-20 el próximo año”. Peláez cerró: “Vamos a seguir dándole mayor difusión, incluiremos a la jugadora norma y tendremos un calendario más largo con apertura y clausura. Lo importante es mantener a las jugadoras en competencia para que tenga un mejor desarrollo. En esos puntos nos vamos a enfocar para 2020”.