** El portero ha estado presente en todos los módulos de preparación para el Sudamericano de 2019
Prensa Vinotinto
El pasado jueves 3 de mayo culminó el módulo 15 de preparación para la Vinotinto sub-20 y el trabajo se va intensificando cada vez más en busca de mejorar las condiciones de los jugadores convocados.
Uno de los juveniles que ha mostrado inmensa mejoría dentro del arco, tanto en su club como en la selección, ha sido el guardameta Miguel Silva, quien volvió a ser llamado por el estratega Rafael Dudamel.
“Ha sido un comienzo difícil a nivel de competencia ya que cada módulo es una experiencia diferente. Hemos sido un máximo de cinco porteros y a nivel de trabajo ha sido muy exigente. En lo personal, creo que la competencia es muy sana pero en la cancha es diferente. Todo cambia y uno se juega un puesto”, expresó el cancerbero de Metropolitanos FC.
En el cuadro violeta, Silva ha disputado en este último semestre cerca de 500 minutos en la máxima categoría del fútbol local, lo que ha llamado la atención del cuerpo técnico, ayudándolo a formar parte de la órbita Vinotinto.
“La oportunidad que me ha brindado mi club con la cantidad de partidos, me da ese plus de ser tomado en cuenta por la selección. Poco a poco voy ganando experiencia que uno necesita para tener madurez en el arco”, indicó.
Sin embargo no será tarea fácil asegurar su presencia en el certamen continental, debido al buen rendimiento que han tenido sus compañeros en el arco. A pesar de esto, se percibe un ambiente de familia y apoyo entre cada uno de ellos, teniendo una sana competencia para buscar la titularidad.
“Creo que es una competencia muy sana. Para algunos es nuestro tercer proceso. La comunicación entre nosotros, tanto dentro como fuera de la cancha, ha hecho que más que un grupo seamos una familia. Al que le toque entrar, recibe nuestro apoyo ya que es una hermandad en el arco. En cada entrenamiento nos hemos ayudado a que seamos mejores en el nivel de exigencia. Falta mucho para el Sudamericano, primero quiero quedar entre los 23 y luego pelear por el número uno”, manifestó.
Crecimiento
La formación en categorías inferiores ayuda a que los jugadores vayan creciendo de una forma rápida y se mantengan en el entorno del equipo. Para Miguel Silva, este sería el tercer proceso formativo y siente que cada vez está más cerca de llegar a la categoría absoluta.
“Este sería mi tercer proceso. He cambiado mucho, la sub-20 es un paso más a la absoluta. Este es un proceso para dar el siguiente paso de la carrera. Nunca he dejado de trabajar para estar aquí. La selección es algo de momento, constancia y trabajo. Para estar aquí nunca puedes regalar el oro porque el que está atrás se está esforzando al máximo”.
Finalmente, como todo futbolista se plantea objetivos a corto y largo plazo. Para el cancerbero del equipo capitalino, el Sudamericano está entre ceja y ceja. “Mis metas a corto plazo son jugar y sacar a mi club adelante. Poco ir madurando esa etapa. A largo plazo son ir al Sudamericano y ser campeones de Sudamérica”, cerró.