Otro duelo épico entre los gigantes de nuestro futsal se vivió en el PNU. Emoción, lucha, goles a granel y la confirmación de que a esta instancia han llegado los dos clubes más potentes del país. Lo ganó Trotamundos y ahora la serie se marcha a Valencia con empate a uno.
Los primeros compases nos hicieron pensar que la estrella se teñiría de rojo. Porque lo dirigidos de Karin Hung, afilados y oportunos, construyeron una ventaja de tres por cero, capitalizando también errores de los visitantes.
“Chavela” Vidal no se podía quedar ausente de la lista de goleo de esta gran final. Treinta segundos fueron suficientes para que el “killer” de Guanare anotara su trigésimo tercer tanto de la campaña (récord para la Liga). Al minuto ocho, tras otro robo de pelota y con remate cruzado, Viamonte ampliaba a dos por cero. El siguiente caraquista en anotar fue Sthormes, que ha tomado rol protagónico en esta serie final. El tres a cero brillaba en el marcador y Matheus tenía que pedir un tiempo para reorganizar al equipo.
Fue el momento bisagra de lo que parecía un paseo de salud para el “Rojo”. Porque enseguida Muñoz anotaba con remate potente por entre las piernas de Pacheco, un tanto que descontaba el marcador para los carabobeños y les regresaba a la discusión por los puntos y la estrella.
Allí el partido comenzó a equilibrarse. Ese ida y vuelta permitió al “Pelón” Villanueva, tras una contra iniciada por el golero Parra, poner el partido apenas por un gol. Faltaban dos minutos para la finalización del primer tiempo.
El inicio del complemento fue prometedor para los de casa porque Cabarcas, otro jugador que ha tomado protagonismo en la final, volvía a distanciar al Caracas. Pero los muchachos de “corazón guerrero”, lejos de venirse abajo, encontraron ánimo para remontar y con tantos de Terán y Esteira pusieron las cosas iguales a cuatro.
Muñoz con una anotación al minuto treinta concretaba la remontada y de allí en más Trotamundos, consiente o inconscientemente, retrasó sus líneas en busca de sellar la victoria que empatara la serie. En los minutos finales renunció sencillamente a atacar y cuando parecía que se levaban la victoria Carlos Polo, con un remate infernal, levantó a toda la grada del PNU con un golazo que empataba las acciones a cinco y forzaba el alargue.
En la prórroga el temor a volver a fallar y comprometer con ello a su equipo, atenazó a los jugadores y transcurrió sin ocasiones. Los penales se hicieron obligatorios para encontrar ganador y allí, el “Fantasma” Báez, asignado a la misión de proteger el arco, detuvo un disparo del “Mono” Ramos lo que dejó en bandeja la ocasión servida que Terán no desperdició.
La serie se marchará ahora a Valencia donde se jugarán, al menos dos partidos más, este miércoles once y jueves doce de octubre. La final esta buenísima.